sábado, 6 de diciembre de 2014

EL DINERO COMO CAUSA DE DIVORCIO

El dinero en muchos de los casos de divorcio tiene una injerencia muy importante, entre ellas podemos contar el hecho de que este elemento es muy mal administrado por uno de los integrantes del matrimonio que puede llevarlo a una desgracia económica. 

En algunas ocasiones el malgastar este recurso en cosas superfluas y no poner énfasis en las necesidades propias del hogar puede llevar a disputas interminables entre ambos cónyuges encaminándose al rompimiento y al divorcio.

Algunos matrimonios han decidido que lo que gana cada uno sea gastado por quien lo gana olvidando poner un monto en fondo común para beneficio de la familia de tal forma que van olvidando las necesidades propias de la convivencia familiar.

Más aún en la actualidad con el famoso dinero plástico (tarjetas de crédito y débito) cada uno adquiere bienes y servicios que satisfagan sus gustos y preferencias saturando inclusive el monto autorizado en el crédito de cada una de las mismas, no permitiendo contar con un monto para el gasto en común.

Pero también nos encontramos que el matrimonio se fincó en las expectativas que tiene uno de los cónyuges al escoger como pareja a alguien que tiene solvencia económica elevada pensando que la hacerlo ganará un futuro halagador y libre de sobresaltos financieros, sin embargo al iniciar la convivencia matrimonial se decepcionan ya sea porque dicha persona no está dispuesta a compartir su riqueza o porque en realidad no sea suya si no de su familia y él o ella solo tienen una asignación mensual que no es suficiente para los dos.

Aunque también suele suceder que quien tuvo las expectativas de una mejora económica comience a malgastar lo que llevará a un disgusto del otro cónyuge .

ISRAEL